Debe ser mayúscula la sorpresa que se llevaron todos nuestros parlamentarios miembros del Congreso de los Diputados cuando comprobaron que si querían seguir utilizando los portátiles con los que llevan trabajando estos últimos cuatro años, habían de hacerlo bajo la condición de adquirirlos al habitual coste residual contable de su hardware…1
…más, ¡cómo no!, el correspondiente impuesto Microsoft de 400 Euros por portátil (y diputado) en concepto de licencia de MS Office Proffessional que quedaban obligados a adquirir junto a su portátil (que para más señas en su mayoría aún necesitarán seguir utilizando, y sobre todo aquellos que renueven sus cargos dentro de un par de meses).
En una nota oficial de la Mesa de la Cámara fechada el 19 de diciembre del año pasado 2007, y a modo de regalo de Reyes Magos, se les comunicaba a nuestros diputados el "decuentillo" que iban a sufrir en su siguiente nómina para engrosar las arcas de Microsoft:
La Mesa de la Cámara, en su reunión de ayer, y en relación con los ordenadores portátiles puestos a disposición de los Diputados, ha adoptado el siguiente acuerdo:
“… facilitar la adquisición de los ordenadores portátiles que los Diputados tuvieren asignados, en la fecha de adopción de este acuerdo, por un precio de 140 euros y en las siguientes condiciones:
- Los Diputados interesados en acogerse a este ofrecimiento, que no sean miembros de la Diputación Permanente, deberán pasar por el Centro Informático de la Cámara antes del último día del mes en que se produzca la disolución, con el fin de que firmen la autorización para el descuento de la citada cantidad de su liquidación final y acepten la obligación de legalizar las licencias de los productos instalados en el equipo.
- Los Diputados a los que se refiere el apartado anterior que no se acojan a este ofrecimiento, deberán poner el ordenador a disposición del Centro Informático de la Cámara, en el mismo plazo, entregándoseles un recibí del mismo. En el caso de que no se ponga a disposición de la Cámara el ordenador en el plazo indicado, se procederá a descontar de la liquidación final el precio en que se ha cifrado el ofrecimiento de aquél más la cantidad de 400 euros, importe correspondiente al coste para la Cámara del software relativo a Microsoft Office Professional. El Centro Informático comunicará a la empresa propietaria de las licencias de software que han salido de su posesión.
- En relación con los Diputados miembros de la Diputación Permanente, titulares y suplentes, regirán las reglas anteriores, si bien el plazo para poner el ordenador a disposición del Centro Informático de la Cámara se extenderá hasta el último día del mes siguiente al de la expiración de su mandato, y la liquidación a tener en cuenta en caso de que dicha puesta a disposición no se produjera será en la correspondiente a la nómina del segundo mes siguiente al de la disolución.”
A fin de proceder a la ejecución de este Acuerdo, se ruega contacten, antes del último día del mes en que se produzca la disolución, con el Jefe de Instalaciones Informáticas, teléfono 6436, ubicado en la Sala de Ordenadores del Centro Informático (planta semisótano, edificio II Ampliación).
Palacio de Congreso de los Diputados, a 19 de diciembre de 2007.
La Diputada del PSC Lourdes Muñoz explica el abuso en su blog bajo el título "No debería ser tan difícil poder elegir software con libertad!":
"El Congreso nos envía una nota indicándonos que podemos adquirir el ordenador por 140 euros+ 400 (en concepto de licencias por el Microsoft Office Professional) o firmar un documento aceptando el descuento de esta cantidad y comprometiéndonos a “legalizar las licencias de los productos instalados en el equipo“. Es decir, o me cobran las licencias directamente o me comprometo a pagarlas."
Y nos recalca las leyes y proposiciones de ley que incumplía dicha venta vinculada e impuesta:
"la adquisición de portátil que se nos planteaba no iba en la línea de la proposición no de ley aprobada por unanimidad en el Congreso (diciembre 2005) que decía textualmente “ Actuar desde el principio general de generar libertad de opción y elección entre la ciudadanía”, ni de la Ley de acceso electrónico a los servicios públicos que incluye como derecho de la ciudadanía “elegir las aplicaciones o sistemas para relacionarse con las administraciones públicas siempre y cuando utilicen estándares abiertos o, en su caso, aquellos otros que sean de uso generalizado por los ciudadanos.” (art 6.2. j)."
Negándose a "legalizar", como decía la nota oficial, lo ya legal pues el software libre que ella pretendía a usar es absolutamente legal:
"No quise firmar el documento dado que no iba a cumplirlo, no iba a ” legalizar” el software instalado, iba a optar por otras aplicaciones, otro software, software libre y legal"
Y la pregunta ante esta venta impuesta es, ¿qué pasa? ¿acaso en ese hardware no corren las otras magníficas aplicaciones ofimáticas como OpenOffice.org, KOffice, WordPerfect, StarOffice, WordPro, AbiWord o cualquiera de las muchas otras disponibles en el mercado? ¿O es que Microsoft ha querido tratar a los diputados españoles con el mismo rasero que trata a los ciudadanos de a pie y ha decidido que igual que a todos nos impone pagar los 100 á 300 Euros que cobra por Windows Vista cada vez que compramos un portatil, nuestros diputados también deben pagar el Windows (ya incluido en los 140 Euros, por cierto) más el MS-Office?
Total, 400 Euros de nada que cual recaudador de impuestos en que se ha convertido, Microsoft se atreve a retener de las mismísimas nóminas de nuestros electos representantes.
Si Microsoft es capaz de llevar a cabo esta operación de venta vinculada ilegal a nuestros diputados… ¿qué no será capaz obligar a pagar a cualquier ciudadano normal a la hora de comprarse un portátil en la tienda?
Nota: la diputada Lourdes Muñoz al final tras mucho insistir logró que le "devolvieran" los 400 Euros que le iban a retener en su nómina e instaló un precioso Linux y OpenOffice.org en catalán como ella quería. ¿Habrán tenido tanta suerte el resto de los 398 diputados y suplentes que han pasado por la Cámara desde el 2004? ¿O por contra se habrá embolsado Microsoft sus codiciados 159.400 Euros de las nóminas de nuestras señorías?2